Cuando escribes un diario de vida, una bitácora de un viaje, ya sea en papel o virtualmente, como es un blog, te puedes enfrentar al mismo momento de escribir a tu pasado, a tu presente y a tu futuro. Cuando pienso que estoy escribiendo sobre cine, en el fondo estoy escribiendo mi propio guión sobre películas ya hechas, pero a veces cambiando finales, nombres de personajes por el de personas, que están ahí, implícitamente recreados. El cine es una realidad que se ficcionó y yo quisiera en cada comentario “realizar” la ficción, traerla a la vida diaria, a la mía, a la tuya, a la de muchos.
Yo no sé si te ha pasado que a veces quisieras retroceder en el tiempo y hacer cosas que no hiciste o deshacer cosas que hiciste. Cuando escribes, por más parco que seas o seamos al hacerlo, siempre estamos mostrando algo de nosotros, aunque sea, simplemente esa parquedad. Hay veces en que nuestro problema, relacionando con otra película aquí comentada, “Mi vida sin mí”, es que queremos escribir, comentar, vivir la vida de otros, sin necesariamente reflexionar si escribimos cosas que realmente pensamos y no son simplemente, vanas repeticiones de lo que otros nos han dicho, frases llenas de refranes populares, incluso versículos bíblicos aprendidos de memoria, que sirven más como amuleto, que de realidad en nuestras propias vidas, viviendo o practicando “el diálogo de los lugares comunes de la vida" (si no es monólogo…). No se entienda como un desprecio a lo ya dicho, a la sabiduría popular y menos a la que encontramos en las Sagradas Escrituras, sino que por lo vertiginoso del mundo en que vivimos, a veces “absolutizamos” cosas que no lo son o relativizamos lo que no... simplemente porque así nos las enseñaron…simplemente porque así lo queremos... no se trata de cuestionar por cuestionar, sino de cuidar que comemos en un tiempo en que recibimos mucho “alimento chatarra”, de escaso contenido en vitaminas, proteínas y otros, que son de rápida y fácil elaboración para digerir en nuestras mentes, corazones y almas.
El personaje central (Evan) de este relato cinematográfico es un escritor, que escribe su propia vida y como “enfrenta” cada suceso de ella, lo que hace de una manera especial que no detallaremos, porque es parte importante de la trama y no queremos que eso les quite el ánimo a verla.
¿Cómo vivir la vida? ¿cómo cambiar mi vida? ¿cómo es mi vida en relación a los demás? ¿”cabe” Dios en mi vida? Esa es premisa de este film, que quizá sin profundizar en estilos de vida, nos muestra a alguien que genuinamente quiere ser feliz y que otros lo sean.
Yo no sé si alguna vez te has equivocado, supongo que como yo, te ha pasado. Ese error, es probable que te perjudicara a ti, o a otros. Es posible que hayas tenido que pedir perdón, o en caso contrario, que alguien haya tenido que pedirte perdón. A veces pagamos las consecuencias de nuestros errores, con cadenas perpetuas o condenas a corto, mediano y largo plazo, incluso en algunos lugares, con muerte. Ahora, algo hermoso sucede cuando hay perdón ante un error (si quieres, le llamas, misericordia o indulto), pues, por más grande que éste haya sido, si primero se pronunció una de las frases más difíciles o más "rutinarias"....te pido perdón...se genera algo especial, algunas veces ilusorio, sólo como para ganar tiempo y seguir cometiendo equivocaciones, otras con un real arrepentimiento y una nueva actitud.
Aprendí hace mucho tiempo que las heridas tienen que cicatrizar, si no lo hacen, se infectan y continuamente duelen o de ellas sale pus, lo que es sinónimo de algo que se está pudriendo y que pronto pasará la cuenta. Lo que no es fácil, pero si podemos hacer es aprender a vivir con las cicatrices, que por un lado nos recuerdan nuestro error, pero por sobre ese dolor del error (voluntario o involuntario), nos recuerdan la capacidad de perdonar y ser perdonados.
Hay algo que me llama siempre la atención, Dios nos perdona, a veces nos perdona nuestro prójimo, pero cuantas veces, ¿ nosotros no somos capaces de perdonarnos a nosotros mismos?
En este film, vemos como pasan las estaciones del año, con sus características propias, tiempos de tormentas y frío, de calor agobiante y sed , de muerte y resurrección...en una extraña y violenta película que trata más allá de una simple historia de amor, que se resuelve inesperadamente por un detalle que pasa a ser importante para la vida de los personajes.
Alguna vez escribí una canción que habla sobre un detalle, inesperado y tremendo que sigue afectando (para bien) mi vida, ese tema lleva por nombre, Mi pequeño Gran Detalle…Jesús y recuerdo aún otra, que se llama "Te pido perdón".
"...las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas."
2 Corintios 5:17
*El efecto mariposa es un término que se comienza a usar a partir de la década de los 60, cuando un meteorólogo llamado Edward Lorenz, estudiaba el comportamiento de la atmósfera y buscaba encontrar un modelo matemático para predecir el tiempo. Una de las cosas que se descubrieron es que a veces un simple detalle podía cambiarlo todo en la predicción, ese simple detalle se ejemplificó en el aleteo de una mariposa en un lugar del mundo que podía afectar las condiciones climáticas en otro lugar distante.
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