La epifanía de Homero…
Recuerdo haber visto a los Simpsons por primera vez, cuando eran parte del Show de Tracey Ullman, no hablaban, pero algo tenían…que hacía que cuando veía el programa, fuera su aparición, lo que más disfrutaba…por algo perduraron como Show…y por años ya. No podría decir que crecí con ellos, porque desaparecieron un tiempo, hasta que los ví nuevamente con voces y situaciones con un humor crítico hacia la sociedad de donde venían en un principio, pero que de una u otra forma, se hace reconocible en cada lugar. Sí debo decir, que crecí con otras familias especiales…Los Picapiedras (no soy de esa era por sí acaso…), los Supersónicos ( tampoco de esa…) y con otros como Los Locos Addams y Los Munsters ( de cada creo que hay rasgos en mi familia, …pero nunca tanto tampoco…)
Hace poco pasó por Chile, Mike Reiss, uno de los guionistas de la serie a dictar unas conferencias y me llamó la atención, su respuesta a una de las preguntas… obvias:
¿hay alguna posibilidad de que los Simpson vengan a este país en algún capítulo?
"Donde quiera que voy me preguntan lo mismo. Pero cuando un país aparece en el show terminan muy enojados con nosotros. Así que piénsenlo dos veces si de verdad quieren que los visitemos".
Reírse de uno mismo es algo que cada vez es más sano…reírse de los otros…no tanto…pero hacerlo con ellos, si tiene algo especial…
Tengo algo de Flanders…más que el hecho de compartir la zurdera…también la fe…aunque pase por “fanático” … tiene algo que Homero admira o envidia…pero también tengo algo de Homero, no en que tenga un cerebro pequeño, ni sea indolente…sino que algo de lo niño de él conservo, como también su “fanatismo” al emprender una causa, aunque parezca perdida y salga dañado. Ambos personajes me representan, como también las luchas de Lisa, la paciencia de Marge, el silencio observador de Maggie, las aparentes locuras de Bart y su rebeldía con causa…desconocida…Sólo no quisiera, ni quiero parecerme a Montgomery Burns ni a Smithers…hasta las hermanas de Marge me simpatizan…pero confío que alguna vez…Burns cambiará…y no sólo por conveniencia…y que Smithers…dejará de “amarle” tanto…
Como comedia, obviamente, su encanto está en agrandar rasgos…pero cuantos personajes…parecen personas…que tal hemos visto o conocido y que a veces no resultan tan gratos…Algún presidente dice por ahí que como familia no son un ejemplo a seguir…no creo que hayan querido serlo, ni lo sean, sino que sólo muestran parte de nuestra propia disfuncionalidad, no para exaltarla…sino para ironizar con ella…Jesús (Jebús para Homero…que ni siquiera sabe su nombre, pero tiene al menos la conciencia de su existencia…) la usaba al conversar, no para burlarse de otros, sino que para hacer reaccionar…reflexionar, cambiar…muy distinto es el sarcasmo, que no sólo saca ronchas, sino que abre heridas, que pueden ser más dañinas que lo mismo que se quería combatir.
Muchas veces se ha dicho que el “humor gringo” es básico, grotesco, simple…puede ser que en algunos casos sea así, que el excesivo juego con la literalidad, o con malas interpretaciones de la realidad… comedias de equivocaciones…no sea sino el reflejo de la humanidad, que se ríe de distintas cosas, pero que al final parece que nos reímos de lo mismo…de lo poco sabios que somos, de básico, grotesco y hasta simple de nuestros errores…y el peor de ellos, no reconocerlos…
Eso hacen Los Simpsons…no reconocer en muchas oportunidades…ocultar lo evidente, pero también hay veces que son confrontacionales, en ambos casos, es posible que salgan perdiendo…pero en eso hay un triunfo, el de aprender a fracasar, a reconocer que se es mediocre, pero hay esperanza, en poder mejorar nuestra mediocridad…no me refiero a perfeccionarnos en ella…como ironiza nuestra familia “amarilla”…
Ja ja…diría Nelson, el matón de la serie, que molesta a todos, pero que es un reflejo de su propia familia. Salud diría Barney que se alcoholizó gracias a la ayuda desinteresada de Homero…El amigo Moe…quien siempre estuvo enamorado de Marge y que es tan amigo de Homero…como anhelaría ser su rival… o tan sólo ayudar en lo que necesitara su “amada simpsónica” (no vale Platón para este caso), pero sin aspirar a nada más que un gracias, de esta fiel mujer…que es correspondida en la misma forma por su esposo, a pesar de las tentaciones…(Memorables son las veces que recuerdan su amor con la música de Los Carpenters…que para mí, siempre fue un grupo somnoliento…(espero no herir a sus admiradores, ni el recuerdo de su vocalista, que trajo a la luz pública una enfermedad tan macabra como la anorexia).
Análisis de la familia, se pueden hacer muchos, de la película también…habrá quienes dirán que es un episodio largo en pantalla grande…que las voces de las traducciones no son las mismas, que han perdido vigencia, que otros han tomado su cetro…que ya no ironizan tanto, o que sus temáticas se están repitiendo o que no ironizan con todo o todos…puede ser, pero a mí no me importa, porque nunca han estado en un cetro…soy “incondicional”, pero no “fanático”, como lo soy de mi propia familia, con sus virtudes y defectos…
Es un film que habla de esperanza…de redención para Homero, de perdón, de sacrificio por el prójimo, de amor por la familia, de querer ser un buen ejemplo, de epifanías o apariciones, de revelaciones…o comprensiones de la realidad, a pesar de nuestras limitaciones físicas, mentales, emocionales y sobretodo espirituales. Hay momentos que me causaban mucha gracia, otros no tanto…pero en la vida real, también es así ¿o no?
Hay guiños a otras películas…sobretodo a las de Disney, que siguen siendo un referente, gusten o no…donde hay otras familias disfuncionales…o no convencionales, donde sólo hay tíos y sobrinos (como lo plantean Ariel Dorfman y Armand Mattelart en su “Para leer al Pato Donald”, en una perspectiva política, a la que puedes o no adherir, pero en la que encuentras algunas cosas interesantes). Un mundo mágico que se ve enfrentado a otra magia, la simpsoníaca…de la cual no sale tan bien parada…pero igual sigue coexistiendo…Son tantos los personajes que han pasado por la serie, y los que pasan por el film, que hasta me contagié…y quise ser uno de ellos, simpsonizándome en una de las webs que te lo permiten, el resultado…un cierto parecido, pero me gustaría ver con que ojos grandes y redondos me ven los Simpsons a mí…ese sería un desafío…y también una radiografía del ser y parecer…de discurso y silencios…de sueños y pesadillas…de vida y…muerte, de realidad y fantasía…
¿Estará considerado un ríete de tu prójimo como de ti mismo…en el amarás a tu prójimo como a ti mismo?
Un abrazo a todos. Intentando reírme cada vez que puedo…aunque a veces sólo me sonrío en el espejo de la vida diaria.
¿Qué tal tú? ¿Cuál es tu epifanía?
Iván
P.D. Recomendación. Siéntense antes que empiece y no se paren hasta que terminen los créditos…Otra más…el libro del cual Homero dice que no tiene respuestas…sí las tiene, sólo que hay que hacer la pregunta correcta…
Recuerdo haber visto a los Simpsons por primera vez, cuando eran parte del Show de Tracey Ullman, no hablaban, pero algo tenían…que hacía que cuando veía el programa, fuera su aparición, lo que más disfrutaba…por algo perduraron como Show…y por años ya. No podría decir que crecí con ellos, porque desaparecieron un tiempo, hasta que los ví nuevamente con voces y situaciones con un humor crítico hacia la sociedad de donde venían en un principio, pero que de una u otra forma, se hace reconocible en cada lugar. Sí debo decir, que crecí con otras familias especiales…Los Picapiedras (no soy de esa era por sí acaso…), los Supersónicos ( tampoco de esa…) y con otros como Los Locos Addams y Los Munsters ( de cada creo que hay rasgos en mi familia, …pero nunca tanto tampoco…)
Hace poco pasó por Chile, Mike Reiss, uno de los guionistas de la serie a dictar unas conferencias y me llamó la atención, su respuesta a una de las preguntas… obvias:
¿hay alguna posibilidad de que los Simpson vengan a este país en algún capítulo?
"Donde quiera que voy me preguntan lo mismo. Pero cuando un país aparece en el show terminan muy enojados con nosotros. Así que piénsenlo dos veces si de verdad quieren que los visitemos".
Reírse de uno mismo es algo que cada vez es más sano…reírse de los otros…no tanto…pero hacerlo con ellos, si tiene algo especial…
Tengo algo de Flanders…más que el hecho de compartir la zurdera…también la fe…aunque pase por “fanático” … tiene algo que Homero admira o envidia…pero también tengo algo de Homero, no en que tenga un cerebro pequeño, ni sea indolente…sino que algo de lo niño de él conservo, como también su “fanatismo” al emprender una causa, aunque parezca perdida y salga dañado. Ambos personajes me representan, como también las luchas de Lisa, la paciencia de Marge, el silencio observador de Maggie, las aparentes locuras de Bart y su rebeldía con causa…desconocida…Sólo no quisiera, ni quiero parecerme a Montgomery Burns ni a Smithers…hasta las hermanas de Marge me simpatizan…pero confío que alguna vez…Burns cambiará…y no sólo por conveniencia…y que Smithers…dejará de “amarle” tanto…
Como comedia, obviamente, su encanto está en agrandar rasgos…pero cuantos personajes…parecen personas…que tal hemos visto o conocido y que a veces no resultan tan gratos…Algún presidente dice por ahí que como familia no son un ejemplo a seguir…no creo que hayan querido serlo, ni lo sean, sino que sólo muestran parte de nuestra propia disfuncionalidad, no para exaltarla…sino para ironizar con ella…Jesús (Jebús para Homero…que ni siquiera sabe su nombre, pero tiene al menos la conciencia de su existencia…) la usaba al conversar, no para burlarse de otros, sino que para hacer reaccionar…reflexionar, cambiar…muy distinto es el sarcasmo, que no sólo saca ronchas, sino que abre heridas, que pueden ser más dañinas que lo mismo que se quería combatir.
Muchas veces se ha dicho que el “humor gringo” es básico, grotesco, simple…puede ser que en algunos casos sea así, que el excesivo juego con la literalidad, o con malas interpretaciones de la realidad… comedias de equivocaciones…no sea sino el reflejo de la humanidad, que se ríe de distintas cosas, pero que al final parece que nos reímos de lo mismo…de lo poco sabios que somos, de básico, grotesco y hasta simple de nuestros errores…y el peor de ellos, no reconocerlos…
Eso hacen Los Simpsons…no reconocer en muchas oportunidades…ocultar lo evidente, pero también hay veces que son confrontacionales, en ambos casos, es posible que salgan perdiendo…pero en eso hay un triunfo, el de aprender a fracasar, a reconocer que se es mediocre, pero hay esperanza, en poder mejorar nuestra mediocridad…no me refiero a perfeccionarnos en ella…como ironiza nuestra familia “amarilla”…
Ja ja…diría Nelson, el matón de la serie, que molesta a todos, pero que es un reflejo de su propia familia. Salud diría Barney que se alcoholizó gracias a la ayuda desinteresada de Homero…El amigo Moe…quien siempre estuvo enamorado de Marge y que es tan amigo de Homero…como anhelaría ser su rival… o tan sólo ayudar en lo que necesitara su “amada simpsónica” (no vale Platón para este caso), pero sin aspirar a nada más que un gracias, de esta fiel mujer…que es correspondida en la misma forma por su esposo, a pesar de las tentaciones…(Memorables son las veces que recuerdan su amor con la música de Los Carpenters…que para mí, siempre fue un grupo somnoliento…(espero no herir a sus admiradores, ni el recuerdo de su vocalista, que trajo a la luz pública una enfermedad tan macabra como la anorexia).
Análisis de la familia, se pueden hacer muchos, de la película también…habrá quienes dirán que es un episodio largo en pantalla grande…que las voces de las traducciones no son las mismas, que han perdido vigencia, que otros han tomado su cetro…que ya no ironizan tanto, o que sus temáticas se están repitiendo o que no ironizan con todo o todos…puede ser, pero a mí no me importa, porque nunca han estado en un cetro…soy “incondicional”, pero no “fanático”, como lo soy de mi propia familia, con sus virtudes y defectos…
Es un film que habla de esperanza…de redención para Homero, de perdón, de sacrificio por el prójimo, de amor por la familia, de querer ser un buen ejemplo, de epifanías o apariciones, de revelaciones…o comprensiones de la realidad, a pesar de nuestras limitaciones físicas, mentales, emocionales y sobretodo espirituales. Hay momentos que me causaban mucha gracia, otros no tanto…pero en la vida real, también es así ¿o no?
Hay guiños a otras películas…sobretodo a las de Disney, que siguen siendo un referente, gusten o no…donde hay otras familias disfuncionales…o no convencionales, donde sólo hay tíos y sobrinos (como lo plantean Ariel Dorfman y Armand Mattelart en su “Para leer al Pato Donald”, en una perspectiva política, a la que puedes o no adherir, pero en la que encuentras algunas cosas interesantes). Un mundo mágico que se ve enfrentado a otra magia, la simpsoníaca…de la cual no sale tan bien parada…pero igual sigue coexistiendo…Son tantos los personajes que han pasado por la serie, y los que pasan por el film, que hasta me contagié…y quise ser uno de ellos, simpsonizándome en una de las webs que te lo permiten, el resultado…un cierto parecido, pero me gustaría ver con que ojos grandes y redondos me ven los Simpsons a mí…ese sería un desafío…y también una radiografía del ser y parecer…de discurso y silencios…de sueños y pesadillas…de vida y…muerte, de realidad y fantasía…
¿Estará considerado un ríete de tu prójimo como de ti mismo…en el amarás a tu prójimo como a ti mismo?
Un abrazo a todos. Intentando reírme cada vez que puedo…aunque a veces sólo me sonrío en el espejo de la vida diaria.
¿Qué tal tú? ¿Cuál es tu epifanía?
Iván
P.D. Recomendación. Siéntense antes que empiece y no se paren hasta que terminen los créditos…Otra más…el libro del cual Homero dice que no tiene respuestas…sí las tiene, sólo que hay que hacer la pregunta correcta…
2 comentarios:
Mike Reiss en su visita a nuestro pais (chile)también dijo, que en santiago es el unico lugar en el mundo que hace mas frio adento que afuera de la casa , es curioso yo e vivido casi toda mi vida en santiago y nunca me habia dado cuenta de este detalle que es muy cierto
Hola:
me había dado cuenta...no sólo porque haya vivido casi toda mi vida en Santiago, sino porque me ha dado frío...y porque algunas visitas también me lo han comentado. Ahora, no sé si será el único lugar del mundo, no he estado en Springfield en invierno...
Un abrazo
Iván
Publicar un comentario