martes, febrero 12, 2008

Chile puede



“El problema no es tanto como subirlo, lo que nosotros nos preguntamos es como lo van a bajar”

Cuando Guillermo Zúñiga (Boris Quercia), profesor de castellano y poeta… le anuncia a su novia Ana María Cumsille (Javiera Contador), que será el primer astronauta chileno…se produce un quiebre, pero también aparece la promesa del amor que quiere perdurar. Para él, es la única forma de enfrentar su propia mediocridad, su timidez, su deseo de cambiar la historia y brindar lo mejor para quien ama.

Ser elegido por un reality y que su aspiración sea firmar contrato de imagen con una multitienda, nos hace preguntarnos acerca de las motivaciones del corazón, pues el personaje, no lograr comprender del todo, que en su decisión, está en riesgo, su proyecto de vida y su propia vida. Recuerdo aún una frase publicitaria que decía alguien que “se amaba a sí mismo”, que fue tan efímera, como su presencia en los medios. Nuestra forma de ser “chilena”, se fortalece en realidades y mitos, muchas veces en “triunfos morales”, por eso es que, cuando de vez en cuando, aparecen éxitos, generalmente, deportivos, celebramos con un entusiasmo que nos hace perder el control y sentir como si hubiésemos llegado a la meta…o agradecer que otros hayan llegado…por nosotros…

El tema de la mediocridad, es algo que va sombreando y obsesionando la vida de Patricio Rodríguez (Willy Semler), el empresario que pasa a la clandestinidad, para llevar adelante este proyecto independiente, para resaltar que Chile, efectivamente puede lograr la hazaña de poner a un chileno en órbita, que lo hace con ayuda de un argentino (Hugo Arana).

Todavía está en el recuerdo un hecho verdadero, como fue el tristemente célebre y perdido…Fasat Alfa, el primer satélite chileno, que no alcanzó para dicho popular…como el conocido ”más perdido que el Teniente Bello”, pero que nos retrata en parte, por los intentos frustrados, luego de grandes anuncios, los que son expresados muchas veces en titulares magníficos, por “expertos en lanzar fuegos artificiales” hacia la prensa y desde ella. Es preciso mencionar, cierto tipo de personajes periodísticos que aparecen en el film, destacando la actuación de Alvaro Rudolphy, dispuesto a cualquier cosa, por lograr la noticia, incluso, a mentir. Sólo para recordar…tenemos o tuvimos un Fasat Bravo que hizo alguna labor de provecho y aún tenemos un aspirante chileno, al que llamamos de verdad el primer astronauta, pero es un capítulo que no tocaremos, por cuanto aún no se ha cerrado, pero si postergado, en más de una ocasión.

“No quiero hacer nada…no la quiero embarrar…” es una frase típica, para no tener que enfrentar responsabilidades, que se confronta con el “démosle no más, en el camino se van arreglando las cosas”, lo que podríamos llamar, la mentalidad del “maestro chasquilla” , que nos hace hacer cosas más allá de las que efectivamente, sabemos, podemos o tenemos que hacer…

Ahora, nos encontramos con la realidad de grandes potencias que han sido parte de “la Guerra de las Galaxias” , no de la película… sino la de la guerra fría, que aparecen en formas distintas, donde una ve como una amenaza y con cierta paranoia todo lo que pasa y otra mantiene un cierto aire de nostalgia de glorias pasadas, a la espera de reverdecerlas. La interpretación de Bélgica Castro es genial en ello.

Hay veces en que las cosas hay que hacerlas a pulso, sin contar con las mejores tecnologías, eso invita al desafío del ingenio, es como el músico que sabe bien la partitura y que está listo para improvisar, es decir, aflora algo más profundo y encuentra las soluciones más inesperadas, pero eficaces, para cumplir un misión… En este caso, había recursos económicos, técnicos y humanos, pero suceden otros percances, que hacen que la vuelta a la tierra se complique, como le pasa a la misma película, que a pesar de los recursos, no sea del todo, la comedia, que podría haber sido, pero quizá, es lo que buscaron Quercia (su guionista) y Larraín (su director). Aunque hay partes tan reconocibles de nuestra idiosincrasia, que es imposible no reírnos.

Hay varias actitudes que vemos en el film, entre ellas la del temeroso v/s el temerario, la voluntad v/s la voluntariedad, la fidelidad v/s el engaño, la realidad v/s la apariencia. También está presente, el deseo de gloria por sobre el fracaso, pero sobre ambas, del amor…que es la verdad en el titular, que todos esperamos, que CHILE PUEDA( y no sólo Chile)…decir que comparte la buena nueva que ha recibido:

“Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo” 1 Juan 5:11

Un abrazo

Iván

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